TrailRun Nº39

TrailRun Nº39

SEPTIEMBRE 2019

CLÁSICO VERANIEGO

Pues sí, para mí es ya un clásico del verano este paseo en modo off por las montañas, normalmente, Picos de Europa. Lo reconozco, soy un auténtico enamorado de estas moles calizas que aquellos avezados marineros avistaban en primer lugar tras su vuelta del Nuevo Mundo, antes de llegar al continente…

Julio, mi sobrino y yo, nuevamente nos hemos adentrado por estos macizos hasta recalar en el refugio del Urriellu, a los pies del Picu, donde los irreductibles guardas siguen manteniendo las perturbado- ras ondas del wiffi alejadas.

Hemos llegado después de comer, previo paso por Bulnes y el refugio de Cabrones donde nos hemos despedido del sol para adentrarnos en esta cerrada niebla, tan característica en el Central. Hemos aprovechado el paso calmo para pasar a saludar a algunos amigos a los que a pesar de ver de año en año, siguen luciendo inalterables la enseña de la amistad, Adolfo, Sara, Tomás, Sergio, Iñigo, Melchor y María. Más prisa que nosotros tenían Tito Parra y Sergio Tejero, nos han pasado con mucha alegría en las piernas y con la respiración acelerada, parece mentira que hayan disputado Ronda dels Cims y Mitic en Andorra hace tan solo unos días.

Dentro del refu, mientras esperamos la cena de 5 tenedores con el sello de María, medio centenar de personas disfrutan del momento. La estampa es de 2019 pero es absolutamente atemporal, anacrónica si me lo permitís.

Un grupo de escaladores juegan a cartas mientras hablan de vías imposibles o de, tema recurrente, Alex Honnold y se estado de “salud mental” puesto sobre el celuloide en la oscarizada “Free Solo”; una familia inglesa se anima aprendiendo a jugar al parchís con una pareja de Málaga; un grupo de portugueses, los últimos en llegar, devoran tostadas de Cabrales, la hora de la cena aún se les antoja lejana para poder esquivar a la hambruna; dos franceses juegan un ajedrez magnético; Julio Cernuda acaba de llegar con tres clientes a los que está guiando por el Anillo; mi sobrino y yo, libramos una cruenta batalla naval sobre un océano de improvisada cuadrícula de cuaderno de espiral, B3-agua, C2-tocado, C3-hundido…

Nada se me ocurre que pueda definir mejor la felicidad en este momento.
¡Bendita desconexión!

José Antonio de Pablo «Depa»